Gestión de un proyecto técnico en un entorno operativo

• Analizar las necesidades.
• Elaboración de especificaciones técnicas.
• Analizar las funcionalidades y limitaciones del producto/servicio que se va a desarrollar.
• Establecer el nivel de prestaciones del producto/servicio.
• Organizar las tareas en paquetes de trabajo.
• Establezca los objetivos, el alcance, los resultados y los recursos necesarios para el proyecto.
• Asignar las distintas responsabilidades inherentes a las actividades: R. A. C. I.
• Estimular la creatividad de los equipos internos y los proveedores.
• Activar las 4 palancas de la gestión del cambio.

Construir su proyecto

• Planificar el proyecto en tareas utilizando métodos de capacidad finita y no finita.
• Colaborar en el escalonamiento y replanteo del proyecto.
• Planificar etapas, actividades y tareas: en términos de plazos, carga de trabajo y coste.
• Elaborar los distintos procedimientos: medir los progresos, gestionar los cambios, etc.
• Establecer las normas de funcionamiento del proyecto.

Anticiparse a los riesgos

• Definición del plan de gestión de riesgos (análisis de riesgos del proyecto).
• Establecer normas y procedimientos de escalada.
• Prepare su plan de crisis.
• Elaborar el plan de comunicación del proyecto con las partes externas.
• Implicar a la cadena de suministro en el desarrollo.

Gestión del equipo del proyecto

• Dirigir el equipo del proyecto.
• Dar sentido al proyecto para los empleados.
• Desarrollar la autonomía de los equipos.
• Hablar con una persona difícil.

Gestión del proyecto

• Medir y analizar las distintas desviaciones: plazos, recursos, costes.
• Gestionar con una herramienta ágil: Kanban.
• Priorizar eficazmente las acciones.
• Mantenerle informado de los progresos.
• Implicar en el proyecto a los responsables de la toma de decisiones.
• Comunicación con las partes interesadas.

Cierre del proyecto

• Ofrecer los resultados esperados.
• Comunicación sobre los resultados.
• Cierre de un proyecto de desarrollo.
• Proporcionar servicio posventa.
• Capitalizar las experiencias felices y post mortem.
• Normalizar herramientas y procedimientos.